Como breve introducción, debo decir que todos los comentarios siguientes fueron realizados en lugares públicos, con dos o más personas presentes y/o a una distancia suficiente del emisor como para captar el mensaje de manera obligada, voluntaria ó involuntariamente.
1. - ¿Por qué tardaste tanto?
- Es que estaba haciendo popó.
Autor. Vergonzosamente mío.
2. - ¡Que pasó!, no lo oí que pujara, nada más lo vi sentadito.
Autor. Intendente del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
3. Hija, me dijiste que sólo ibas a hacer pipí.
Autor. Señora en baño de McDonald's, que acababa de colocar a su hija en el lavabo para hacer sus necesidades.
4. - Maestra: ¿Qué es lo que más le gusta a tu papá?
Aldo: La cerveza.
Autor. De nuevo, yo.
5. ¿Entonces si se te quitaron las hemorroides con la crema que te mandé?
Autor. Amigos en la fila del Blockbuster.
6.
2 comentarios:
Ajajajajajajajaja !!
Estaba una vez en un plaza con mi pareja de ese entonces. Olí el delicioso aroma del chocolate saliendo de la tienda Arnoldis, y le comenté que siempre que veía ese lugar recordaba la sucursal de Plaza México que estaba junto a una tienda de billetes viejos
--Antiguos -- Dijo mi acompañante
-- ¡Eso no les quita lo viejos! -- Grité.
Justo en ese instante un grupo de ancianos estadounidenses pasaban cerca de mí, viéndome con odio, quiero creer que entendieron el mensaje hacia ellos...
Ajajajajajaja. Sí... esos momentos son cómicos después de la vergüenza generada.
Jaa na !!
Dios!!! Que buena experiencia!!! Juro que solté una carcajada en voz alta... en plena oficina... no es que alguien se haya dado cuenta, pero de todas maneras hay que conservar el pudor.
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